Justin Bieber vuelve a ser noticia por meterse en líos con un coche. El cantante fue detenido enLos Ángeles al comprobar la policía que iba demasiado lento. El canadiense llamó la atención de los agentes al conducir un Rolls-Royce descapotable muy despacio, algo que puede llegar a ser conducción temeraria dependiendo del tramo en el que se encuentre.
"Les llamó la atención que un niño condujera un Rolls-Royce descapotable", dice uno de los testigos del incidente. La policía detuvo el coche, propiedad de Sean Kingston, gran amigo de Justin Bieber y su acompañante en aquel momento, y le pidió el carnet de conducir al joven.
Sin reconocerle, los policías recriminaron a Justin su lentitud al volante tras haber comprobado que, efectivamente, el joven tiene permiso de conducir. "Conducía como una viejecita", ha dicho el mismo testigo. Por eso, y porque, físicamente, el cantante dio la impresión de tener unos cuantos años menos, la gente que vio el suceso no se sorprendió porque los agentes detuvieran al novio de Selena Gómez, quien estos días ha hecho saltar las alarmas con su excesivo cansancio.
Amable y correcto, Justin Bieber no tuvo ningún problema en mostrar el carnet de conducir y aclarar que el coche era de su amigo, quien corroboró el testimonio del cantante. Asi, y tras verse rodeados de una veintena de personas que enseguida se dieron cuenta de que era Justin quien conducía, los dos amigos pudieron proseguir su camino. En su Twitter, el cantante, a pesar de no haber comentado nada acerca del incidente, sí ha reconocido, cueriosamente horas después del alto de la policía, que Sean Kingston es uno de sus mejores amigos, poniendo como 'hastag' #realfriend.
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